Álvaro Pérez, DT del seven uruguayo, hizo un balance del torneo con Rugbynews, y sobre lo que se viene para Losa Teros

¿Que sensación quedó tras la derrota?
El equipo estaba bien trabajado, le ganó la ansiedad, el nerviosismo de empezar muy bien un partido que tenés controlado y cuando quedamos abajo no tuvimos  la calma para revertirlo, a pesar del dominio y de ser el que más propuso. Pagamos la inexperiencia. Era una serie bastante dura porque sabíamos que perdíamos un partido y ya estábamos condenados a jugár el torneo de abajo. Es injusto, pero era el sistema que teníamos, y es una experiencia para todos. En el seven siempre tenés revancha en la copa de Plata, de Bronce, pero acá no nos tocó. Hemos sacado las conclusiones y tuvimos rebeldía para aprender de esto. Éramos el que tenía más obligaciones, al menos de los uruguayos, por el trabajo previo y por salir a defender a Uruguay. Pero estamos confiados en que el trabajo es bueno y los jugadores también, y lo tienen que demostrar.

¿Que hablaron en el vestuario?
Al principio fue tan duro el golpe que dejamos pasar un rato para poderlo digerir, pasar el golpe. Escuchar consejos de gente allegada, o de los chicos que hoy no están con el plantel. En el partido estábamos apurados, queríamos hacer el try de entrada, cuando no tenemos tantos jugadores veloces, acá lo tenemos que laburar, y si lo laburás, viene. Hay jugadores muy buenos, pero todavía tienen que crecer.

¿Fue una exigencia demasiado grande para varios jugadores jóvenes tener que enfrentarse a una final a todo o nada en el primer partido?
No se sí demasiado grande, era lo que nos tocaba. Se trabajó bien, pero se jugó mal. Jugás un partido mal y chau, son 14 minutos. Hay que revertir esa sensación de que no salió lo que uno quería.

¿La falta de los jugadores del XV también es una explicación?
La mayoría de estos chicos ya han jugado los torneos anteriores, y los que faltan, faltan. Estos son los que están y por los que hemos apostado. No estamos lamentándonos por los otros, que además son compañeros. Han jugado en Paraná y han estado con el grupo, simplemente en este momento no están. Son estos, y le damos para adelante. Cuando se integren los otros van a tener que pelar con estos. El lugar no lo tiene seguro nadie, pero el devenir de los torneos nos van a clarificar los jugadores.  Todos sabemos que en la vida de los golpes duros se aprende más que de las cosas buenas, y si sabemos canalizarlo, non tengo dudas de que vamos a crecer.