En una final muy pareja, el equipo de Don Torcuato fue superior y derrotó 15-9 a La Plata
Hindú volvió a hacerlo. Cayó al llano dos años consecutivos, en los que no pudo llegar a la final de la URBA. Sin embargo, este sábado se vengó, y tras ganarle 15-9 a La Plata se consagró como el mejor del rugby de Buenos Aires.
El equipo de Don Torcuato aprovechó de gran manera el try que consiguió al inicio del partido, de intercepción de Díaz Bonilla cuando La Plata estaba lanzado en ataque. Esa diferencia le permitió dominar las acciones, dentro de una tónica cerrada y con pocos espacios.
A La Plata le tocó defender buena parte del partido, pero consiguió que su rival no se le alejara demasiado, y además sumar penales que lo dejaron cerca. Así, se fue al descanso con un 6-7 que dejaba todo abierto para el complemento.
En el arranque de la segunda parte Hindú profundizó su dominio. Tuvo más obtención y arrinconó a La Plata, al que le faltó juego con el pie e ideas con la mano para salir. De esa manera, a través de otro penal a los 11’ y un try de Solano en el juego corto a los 20’, estiró hasta un 15-6 que lo dejaba a un paso de la copa.
De todos modos, La Plata tuvo vergüenza y salió a buscarlo en el final. Atropelló con los forwards, consiguió un penal para que Suffern Quirno pusiera el 9-15, y en el final estuvo cerca de la hazaña. Le faltó una idea más, como en todo el partido, y por eso perdonó. Y también Hindú, el que nunca perdió una final, mostró toda su clase para llevarse una copa más