Se trata de dos mayores y cuatro juveniles, que agredieron la casa y el auto de un dirigente de Old Boys; el club los sancionó por entre uno y dos años
Seis jugadores de Carrasco Polo fueron suspendidos por penas de entre uno y dos años por el club en las últimas horas, luego de que agredieran el auto y la casa de un dirigente de Old Boys el domingo por la noche.
Los hechos se dieron luego de la finalización del Valentín Martínez, cuando por la noche el grupo de jugadores –dos mayores y cuatro juveniles M19- pasaron por la casa del dirigente de Old Boys en varias oportunidades. En una de ellas arrojaron pintura al auto, en otra le pincharon una de las ruedas, en otra arrojaron una piedra a un ventanal de la casa y finalmente arrojaron una piedra al auto del directivo.
Por la mañana, el agredido se comunicó con el Carrasco Polo, para informarles de la situación y de que tenía serias sospechas de quienes podrían haber sido los culpables, ya que entendía podía ser una represalia por la protesta que hizo el club azulgrana para que uno de los jugadores del caballito no jugara la final del Valentín Martínez. Ese jugador estaba suspendido por un tackle alto que le aplicó a un rival de Old Boys B el domingo por la mañana en cuartos de final, y tras la protesta azulgrana no jugó el partido decisivo.
El lunes, tras tomar conocimiento de la situación, Carrasco Polo comenzó las averiguaciones, y por la tarde llegó a quienes eran los culpables, luego de una reunión con los jugadores y con referentes de todo el club, donde se analizó todo lo actuado. En la noche del lunes se le comunicó a Old Boys quienes habían sido los autores de la agresión, en una reunión entre ambas directivas.
El martes por la noche el agredido decidió hacer la denuncia policial en la seccional 14ª. El miércoles Carrasco Polo decidió las sanciones y luego realizó una nueva reunión entre dirigentes, jugadores y referentes, para comunicar las sanciones y todo lo ocurrido en las últimas horas: a uno de los jugadores se lo sancionó con dos años, mientras que para el resto la pena va entre un año y siete meses, un año y cinco meses, y un año. El espíritu del club, según pudo saber RugbyNews, fue el de imponer sanciones duras y ejemplarizantes ante la gravedad de la situación, pero sin llegar a la más dura –la expulsión de la institución- de manera de darles la oportunidad de rehabilitarse y de hacer esa recuperación en el entorno del club.
A su vez la URU ya está informada de la situación, y seguramente el tema pasará a la Directiva y a los tribunales de penas. Uno de los jugadores integra la selección mayor, mientras que otros dos son parte del seleccionado juvenil M19.
El jueves por la mañana hubo una nueva reunión entre las directivas de ambos clubes, en la cual Carrasco Polo entregó una carta de disculpas en nombre de la institución, comunicó oficialmente las sanciones que tomó, y anunció que se va a hacer cargo de todos los gastos de reparación de los destrozos provocados.