Lindsay Hilton es la ganadora del premio Espíritu del rugby 2012 que otorga la IRB; no tiene brazos ni piernas, pero ello no fue obstáculo para entrar a una cancha de rugby
Se llama Lindsay Hilton, y no es la autora del try del año, ni la jugadora con más tackles en un partido, ni quien haya firmado el contrato más suculento de la temporada: es la ganadora del premio del Espíritu del rugby 2012.
Se trata de una chica canadiense de 27 años, que conoció el rugby en el liceo, y como millones de personas en el mundo entero, se enamoró del deporte. Claro, la de ella es una historia diferente: cuádruple amputada de brazos y piernas desde el nacimiento, parecería muy difícil que alguna vez tuviera la chance de entrar a una cancha.
La barreras están puestas para ser superadas, según dicen Por eso Lindsay es la medioscrum de su equipo, el Halifak Tars de Canadá. Se encarga de demostrar que no hay imposibles corriendo tras cada ruck, tomando la pelota y pasándola, guiando a su equipo.
“Soy un apasionada de Rugby y el desarrollo del deporte, especialmente en el lado femenino de las cosas. Soy muy consciente de lo que es un deporte que cualquiera puede jugar”, contó la chica en una entrevista con la cadena CBC News.
“Siempre he tratado de conseguir lo que queremos lograr a pesar de que algunas personas podrían pensar esas metas no son realistas. Como nací sin brazos y piernas que nunca he conocido nada diferente y mis padres y mi familia nunca me trató de manera diferente”, agregó.
“Esto es lo que me gusta. Mi objetivo no es inspirar a la gente, pero si lo logro, bienvenido sea”.
Lindsay es además la vicepresidenta de su club, y directora del programa de alto rendimiento del rugby femenino en su provincia. Además, trabaja como Oficial de la Comunidad de Desarrollo Deportivo de la organización sin fines de lucro, Deporte Nova Scotia.
Según resalta la IRB, el premio Spirit of Rugby “reconoce las hazañas increíbles que se pueden lograr a través de rugby, tanto dentro como fuera del campo, y los que por la influencia de la acción desinteresada las vidas de los demás, hacer una contribución significativa a sus comunidades y demostrar la fuerza del bien que el deporte puede ser en todas las áreas del mundo”.