El DT Pablo Lemoine mostró su satisfacción por el triunfo y por lo que significa hacia adelante

Foto Victoria Acuña-Redaccion RugbyNews

“Este triunfo vale dos años del Plan de Alto Rendimiento. La Eliminatoria se divide en dos repechajes futuros, si no tenemos la suerte de clasificar en el primero con Estados Unidos tenemos el repechaje final. Son dos años más para que el Centro cumpla el objetivo de tener a Los Teros y a las selecciones juveniles entrenando a alto nivel. Era una presión doble, ganar en el Sudamericano pero también mantener todo lo que hemos logrado hasta acá”.

Sobre el partido

“Fue medio contradictorio, mirabas el partido y estaba muy controlado, no veíamos peligro, pero nosotros generábamos penales para que nos hicieran puntos. Había una contradicción desde el análisis que hacíamos en la cabina, no podíamos creer los puntos que nos hacía Chile por errores nuestros y nosotros no poder traducir en puntos el dominio en todas las fases del juego. Igual estábamos tranquilos porque vimos mucho control del equipo, mucha agresividad en la defensa, que me parece la pata más importante, que la defensa y la agresividad que tuvo dio frutos”.

Creo que vemos un equipo que esta jugando hace tiempo juntos y nos nos damos cuenta que había solo tres o cuatro jugadores que ya habían jugado una Eliminatoria para un Mundial. Hay dos lecturas: una es qué bueno el fruto de trabajo de estos años, que se generó todo este grupo, y la otra es que veces le exigimos demasiado a jugadores que no tenían esta experiencia, de un partido a todo o nada. Lo lograron, cumplimos una etapa y para nosotros lo más importante es tener la capacidad de seguir trabajando. aumentando las presiones a los directivos para que nos den las cosas y nosotros aumentando las responsabilidades. Creo que es el orden de esto, esta manjia que no tiene que parar. a veces para eso se necesitan resultados. Esta vez se dio.

Los planes “b” a los que recurrió el equipo.

Nos habíamos puesto como objetivo que ellos cuando vengan a  jugar acá se acuerden donde están: en la tierra de Los Teros, donde es un partido duro siempre. Ahí es donde nos hicimos fuertes: en la agresividad, en el punto de contacto, en los golpes, en el uno contra uno. Se demostró claramente que la agresividad de la defensa iba a traer frutos. Es verdad, no salía el juego colectivo. Lo ví desde el principio. Vi nerviosismo, vi pases largos que no es nuestra características sino un juego de células arriba. Pero vi también que nosotros perdíamos la pelota y ellos la perdían de vuelta porque no tenían oportunidad. Y encima el dominio en el scrum. Las armas que van aflorando, que no estaban previstas, y que surgen inmediatamente. Perdemos el juego colectivo pero inmediatamente aparece la defensa. Y no se cuál nos sirve más, porque el contagio de la defensa, al agresividad en la primera linea de tackle, el scrum, el maul, recuperar en el line contra un saltador de dos metros… a veces un arma no funciona pero entonces funciona otra, y capaz es más positiva que la estratégica que habíamos planificado. Porque la diferencia hoy fue en la agresividad, en la primera línea de tackle. se notó clarísimo que ellos tenían un problema grande ahí.

¿Lo quebraron en los 60 minutos, después que ellos dominaron y no pudieron quebrar?

Hubo un momento que no querían más la pelota. la verdad, el golpe dos o tres contra uno, esos golpes francos de doble tackle, el tirar para atrás al rival, genera una sensación de impotencia. Esa sensación se la transmitimos a todas las áreas de juego de ellos. El scrum pasó a ser malo, el line también, el pateador que acierta 90% pasó a errar… la otra estrategia al final fue la más exitosa.

Sobre el torneo.

“Los tres partidos fueron diferentes: contra Argentina nos sirvió para la confianza, contra Brasil para concretar el trabajo en el juego y la rotación de jugadores, y contra Chile fue la concreción de todo. Se cumplieron varios objetivos: mejorar el nivel contra nuestro punto de referencia como lo es Jaguares, dominar a un equipo inferior como Brasil y lograr la clasificación con Chile. El estadio estuvo perfecto, el nexo de los jugadores con el público también. Creo que se crearon muchas cosas que antes no teníamos”.

El recambio para levantar el nivel en el segundo tiempo.

El equipo la verdad son los 30, 35 que estuvieron involucrados. Dejamos 27 para el Sudamericano, tres concentrando y dos de soporte. De los tres Guille Lijstenstien entró y de los dos entraron Echeverría y Favaro. Es el plantel, los que entrenan en el Centro. Es la gran diferencia, los jugadores rotan y no se nota en el equipo esa necesidad de la individualidad que se veía antes. Hoy creo que tenemos un grupo de jugadores que todos entrenan por igual. Sacamos a uno y sigue funcionando. Es un mérito de ellos mismos porque la competencia la generan ellos mismos. Nosotros podemos darle todo, pero la clave está en la competencia interna. Algunos no aguantan y se bajan, otros compiten y tienen logros. En eso estamos insistiendo. Ahora tenemos dos años para seguir insistiendo, y en dos años este proyecto ya va a estar muchísimo mas instalado en el rugby uruguayo, aceitado desde la colaboración con los clubes, el fruto que se les genera. Creo que ahora van a salir jugadores al exterior, vamos a tener etapas de este centro para seguir creciendo.

“La idea siempre fue generar para los demás, sin olvidarnos de la selección, porque es el motor de la plata, de que Mark Egan venga y te diga “vamos a financiar el proyecto pero antes tienen que ganarle a Chile”. Ahora nos focalizaremos en la Tbilisi Cup, en el Seven, el Mundial M20. El centro va a tener que poner le centro ahí. En la Tbislisi tenemos que buscar resultados y también vamos a probar jugadores, el Mundial de Seven va a ser un objetivo muy importante y ya se está trabajando para eso, el Mundial M20 también. En setiembre está el objetivo de recuperar la plaza del Mundial M19, que la vamos a recuperar sea como sea, hemos focalizado mucha energía del Centro en ellos. Hay mucho para adelante y lo mejor es que de ahora en más se puede trabajar con mucha tranquilidad”.

Los próximos objetivos.

“Es una mala noticia para los jugadores, pero la preparación para Estados Unidos arranca el lunes. Tenemos la Nations Cup en Georgia, en octubre la Américas en Canadá. Son bloques de entrenamiento con el objetivo final de Estados Unidos en el repechaje. Recibimos alguna noticia de parte de la IRB que podía cambiar a marzo o abril del año que viene, lo cual nos daría todo el verano para trabajar”.