En cuanto a los campeones de rugby, Argentina Azul se llevó el seven femenino, SIC se el título de M15, British el de M17 y Carrasco Polo el de M19. El dramatismo de las finales se reflejó en que dos encuentros, las finales de M15 y M17, necesitaron alargue, y el de M17 penales, algo inédito en la historia del Valentín.

 

La tarde de definiciones empezó con la final de M15, en la que San Isidro Club derrotó por 17-14 a Stella Maris, en un encuentro sumamente parejo, el mejor de las finales, en el que los uruguayos empezaron arriba apostando a su clásico juego desplegado, aunque luego San Isidro igualó basándose en un buen control de pelota, y desnivelando por las bandas. Con el partido emparado en 14-14 fueron al alargue, que el SIC terminó desnivelando con un lejano penal en la segunda parte de la prórroga.

 

Luego se pasó a la definición del rugby femenino, con otro encuentro parejo, en el que Argentina fue más efectivo y por eso pegó en momentos clave para sacar las ventajas que le permitieron ganar 17-5 a Vaimaca de Salto y festejar el primer título de su historia, en un torneo en el que tanto las argentinas como las uruguayas se destacaron, metiendo los cuatro equipos de semifinales, y dejando por el camino a los clubes brasileños, que no pudieron venir con sus mejores figuras ya que se selección se prepara para una gira internacional. De todos modos, la fuerte competencia reflejó el crecimiento que ha tenido la modalidad en el continente.

 

Por su parte, la definición de M17 regaló la definición más dramática que recuerde el Valentín Martínez, lo que además la ratificó como la categoría más pareja del torneo. Llegaron a la final Old Christians y British, y ambos entraron a jugar como un partido definitorio, con mucho juego con el pie y defensas que salieron a presionar arriba para no dejar jugar a los medios rivales. Nuevamente los penales tuvieron la palabra, y así el partido se fue 6-6 al alargue, en el cual no se pudieron superar. Terminaron los 30 minutos y los jugadores se saludaron, sin saber cómo seguía la historia. Entonces los jueces los llamaron y enfilaron para los palos, para definir con penales desde la línea de 22.

 

Fueron seis penales, en los cuales ambos acertaron y el empate se mantuvo, por lo que se pasó a definir con drops. Entonces fue Christians el que falló, y con el acierto de British, se terminó la historia y los británicos festejaron el título más parejo del torneo.

 

El plato fuerte de la tarde llegó a la hora 17, con la final de M19. A esa altura ya la cancha principal de Carrasco Polo estaba abarrotada de gente, desafiando el calor infernal de la tarde, en el día más caluroso del año. Se enfrentaban Carrasco Polo y Old Boys, los dos mejores equipos del año, que se volvían a ver las caras para cerrar el año.

 

Y, tal cual una final de mayores, fue un encuentro con muchísimo estudio, poco riesgo y mucho kick táctico, además de defender bien paradas que nunca dejaron que el balón tomara ritmo.

 

En ese contexto de tanta paridad, Carrasco Polo supo manejar mejor los tiempos, y además tuvo la excelente patada de su centro Agustín Ormaechea, uno de los juveniles de mejor proyección en el rugby uruguayo. Sus dos aciertos a los palos le permitieron sacar una diferencia de 6-0, y aunque Old Boys reaccionó y en el arranque de la segunda parte sumó un drop a través de Vilaseca, luego no pudo generar el peligro para hacer zozobrar al local, por lo que el final marcó la ratificación de Carrasco Polo como campeón del Valentín y con la doble corona de la categoría, ya que hace un mes se había llevado el campeonato uruguayo.