A pesar de haber tenido un primer tiempo opaco, los dirigidos por Warren Gatland reaccionaron a tiempo y con un rugby que rayó a gran nivel se llevaron el triunfo ante Escocia por 27-13
El juego dinámico, incisivo y frontal que caracteriza a Gales dio frutos una vez más. Con un plantel joven, pero equilibrado con una cantidad considerable de referentes, los de rojo siguen demostrado que el 4to puesto en la pasada RWC no fue un golpe de suerte.
Warren Gatland ha logrado armar un verdadero equipo, donde cada jugador cumple su función y, si es necesario, con la del compañero. Sobre todo cuando quedan espacios libres y se deben hacer los relevos dentro de la cancha para evitar contratiempos. Los jugadores ya se conocen, y si bien los nombres pueden variar, suele mantenerse una base y una identidad de juego.
Todo eso se vio reflejado este último domingo. Claro que no durante el primer tiempo, que terminó con un escueto 3 a 3 en el tanteador y dejando gusto a poco para ambos lados. Los puntos en los 40´ iniciales fueron anotados por Greig Laidlaw, para la visita, y Leigh Halfpenny, para los locales.
En el complemento, las cosas serían muy diferentes. Apretando a fondo el acelerador y dando clases de rugby a su rival, Gales llegó al ingoal del cardo en 3 ocasiones en tan solo 15 minutos; Siendo los responsables de apoyar los tries Alex Cuthbert y Halfpenny (en dos ocasiones). Este último también aportó las tres conversiones y un penal. Por el lado de Escocia, Laidlaw descontó mediante un penal para dejar el choque 27 a 6.
Lejos de querer achicarse y aguantar con tal de no recibir más puntos, los de azul salieron a buscar más anotaciones para, aunque sea, brindar una actuación más digna. Así fue que Stuart Hogg tuvo una chance inmejorable al quedar solo para correr al ingoal, pero se resbaló y cayó antes de apoyar, lo que hizo que el árbitro Romain Poite cobrara un knock on que no fue. A pesar de eso, Laidlaw remediaría el error de su compañero unos minutos después apoyando su try para poner cifras definitivas al partido: 27-13.
Con esto, el cardo insinuó mediante algunas aproximaciones en terreno rival, pero las mismas quedaron solo en eso: insinuaciones. El juego tibio de Escocia nunca llegó a inquietar realmente a una defensa galesa que se caracteriza por su solidéz, y así los minutos pasaron con el dragón dándole la iniciativa a la visita hasta que llegó el pitazo final.
Así, Gales festejó en Cardiff, lugar donde, a priori, será muy difícil sacar algún punto para los demás seleccionados. El triunfo hace al dragón llegar a lo más alto de la tabla de posiciones, ubicándose en la primera posición del Seis Naciones junto a Inglaterra, que el sábado había vencido a Italia, en Roma.
Las palabras de Galtand antes del inicio del certamen suenen cada vez más fuerte: “Gales luchará hasta el final y tiene con qué para hacerse de la copa”, por ahora, ha sido el que mejor jugó y no será fácil bajarlo.
Los equipos:
GALES (27):
Titulares: 15 Leigh Halfpenny, 14 Alex Cuthbert, 13 Jonathan Davies, 12 Jamie Roberts, 11 George North, 10 Rhys Priestland, 9 Mike Phillips, 8 Toby Faletau, 7 Aaron Shingler, 6 Dan Lydiate, 5 Ian Evans, 4 Ryan Jones (c), 3 Adam Jones, 2 Huw Bennett, 1 Gethin Jenkins
Suplentes: 16 Ken Owens, 17 Paul James, 18 Lou Reed, 19 Andy Powell, 20 Lloyd Williams, 21 James Hook, 22 Scott Williams
Entrenador: Warren Gatland
Tries: Halfpenny (2) y Cuthbert
Conversiones: Halfpenny (3)
Penales: Halfpenny (2)
ESCOCIA (13):
Titulares: 15 Rory Lamont, 14 Lee Jones, 13 Nick De Luca, 12 Sean Lamont, 11 Max Evans, 10 Greig Laidlaw, 9 Chris Cusiter, 8 David Denton, 7 Ross Rennie, 6 Alasdair Strokosch, 5 Jim Hamilton, 4 Richie Gray, 3 Geoff Cross, 2 Ross Ford (c), 1 Allan Jacobsen
Suplentes: 16 Scott Lawson, 17 Ed Kalman, 18 Alastair Kellock, 19 John Barclay, 20 Mike Blair, 21 Duncan Weir, 22 Stuart Hogg
Entrenador: Andy Robinson
Try: Laidlaw. }Conversión: Laidlaw
Penales: Laidlaw (2)
Amonestados: Lamont y De Luca (E) y Jenkins (G)
Árbitro: Romain Poite (Francia)
Estadio: Millennium, Cardiff