El nombre de Gatland en el seleccionado galés de rugby ha ido adquiriendo mayor trascendencia con el paso de los años. Si nos remontamos al comienzo de este proyecto, debemos retroceder 5 años cuando, tras disputarse la RWC de Francia 2007, el coach asumió al frente del dragón.   

 

La primera y más importante idea del coach consistió desde un principio en formar una plantilla apostando al futuro. Disponer de jóvenes promesas de gran nivel, que disputasen partidos internacionales para irlos fogueando de cara a los próximos años. Sumado a algunos pocos veteranos que les mostraran el camino a seguir para triunfar.   

 

Esta iniciativa parece haber tenido sus frutos en la Copa del Mundo 2011. Si bien en esta los de rojo quedaron en el cuarto puesto tras caer ante Australia por el premio consuelo y antes ante Francia por semis, a todos les quedó la sensación de que mereció mejor suerte. Pero el mensaje quedó claro: Gales tiene con qué pelearla y codearse con los poderosos.    

 

Siendo conciente de esto, y teniendo un conocimiento muy importante del plantel, Warren Gatland no dudó ni por un segundo en dar al dragón como favorito para llevarse el certamen, una vez que fue consultado respecto al tema. Las declaraciones del entrenador de origen neozelandés se dieron en el marco de la presentación oficial del certamen de as Seis Naciones y el mismo coach agregó que se llega con todas las ilusiones de hacer las cosas lo mejor posible. 

 

A pesar de ello, y autocrítico como siempre, el seleccionador de los de rojo reconoció que la primera prueba en el 6N será verdaderamente difícil de sortear. En frente estará Irlanda, equipo que los del dragón conocen bien al haberlo eliminado en 4tos de final del pasado Mundial. Para Gatland esta vez será bastante distinto, ya que, según este, ellos “se encuentran en un momento fantástico por el rendimiento de los equipos provinciales irlandeses en el marco de la Copa Europea”.

 

Además, el coach sabe que los trébol afrontarán este certamen de la manera más seria posible, ya que es la posibilidad de revertir la pálida imagen dejada en la pasada RWC, donde su rendimiento nunca terminó de conformar. “Será un rival que, jugando como local, saldrá desde el primer minuto a ser protagonista; al igual que el público, que seguramente llenará el Aviva Stadium”.

 

Más allá de todo, el seleccionador galés manifestó sentirse con confianza de cara al debut. “El objetivo es sacar un buen resultado allá. Si esto se logra, y obteniendo las victorias necesarias en los partidos que nos toca como locales en las fechas posteriores, no sería descabellado pensar en Gales definiendo el certamen”.    

 

"Sería agradable pensar que llegamos al último partido ante Francia con las chances intactas, pero nuestro objetivo será ir partido a partido”. “Hablamos con el plantel para que nadie piense más allá de lo que será enfrentar a Irlanda”, agregaría Gatland. “La idea es tener como motivación los muy buenos resultados obtenidos el año pasado. Que sean la razón por la que podemos decir que se puede luchar por cosas importantes y a su vez  intentar seguir por esta línea, con una identidad definida y sabiendo a lo que jugamos”, remataría el head coach.