La noticia fue confirmada por el director ejecutivo de la franquicia, Hamish Riach, quién reconoció que las obras en el Rugby League Park de Christchurch, la casa temporal que el equipo utilizará en su ciudad, precisan un tiempo mayor para estar terminadas en un 100%.

 

La razón de la mudanza que los Crusaders deben hacer, vale recordar, obedece al terremoto que la ciudad sufrió en febrero de 2011, donde el AMI Stadium, la casa de los locales, quedo en ruinas y con peligro de desplome inminente. Esto obligó a que el equipo jugara en otras ciudades toda la temporada anterior, lo que se reflejó en un importante déficit económico.

 

Si bien Canterbury debutará como local en el Súper Rugby el 9 de marzo ante los Chiefs en Napier en el marco de la tercera fecha, su recorrido en la temporada tendrá antes dos presentaciones como visitante, en Auckland ante los Blues el 24 de febrero y en Dunedin frente a Highlanders el 2 de marzo.

 

Para el siguiente match como local, el 24 de marzo, Riach se mostró confiado en poder regresar al plan determinado de jugar en el Rugby League Park de Christchurch, aunque no descartó la opción de regresar a Napier de ser necesario.