Camardón será el entrenador principal de Los Teros, y no el Head Coach: la aclaración refleja un complejo equilibrio político
“Es Coach, no Head Coach”. El aviso vino desde varios lugares diferentes, para indicar el error involuntario en el que cayó Rugbynews al anunciar la noticia de que Gonzalo Camardón sería el próximo entrenador de Los Teros, por el cual pedimos las disculpas del caso a los involucrados y a los lectores.
Pero el hecho va más allá. Porque refleja el delicado equilibrio de las palabras en el que se atraviesa por estos días, en el trabajo de definición de un cuerpo técnico que será más que un cuerpo técnico. Porque la oferta a Diego Ormaechea para acompañar al ex Puma en el Cuerpo Técnico de Los Teros lo excede a Diego y su vasto currículum: significa a su vez un intento de la URU de alcanzar una paz política, luego de meses de enfrentamientos con Carrasco Polo, y lo pone en medio de una situación incómoda al DT de Carrasco Polo, que por eso avisó que antes de aceptar deberá tener una charla con el presidente de su club, Andrés Sanguinetti, y con la Comisión de Rugby de la institución.
Lo cierto que el título de la nota, en especial la palabrita “Head”, trajo nerviosismos, llamados para un lado y para el otro, y aclaraciones varias. Las aclaraciones se dieron porque lo hablado con los candidatos a acompañar al DT argentino era que sería un Coach. El cargo de Head Coach, por contrapartida, involucraría algo similar a un Director de Selecciones, que se ocuparía del trabajo del XV, pero también de supervisar la labor del seven, de las juveniles y del femenino, y el argentino solo será entrenador del XV.
Pero el tema va más allá de eso. Porque para cuidar el delicado equilibrio de poder , la URU pretendía no nombrar a Camardón como Head Coach, ya que algunos sectores de Carrasco Polo entienden que Ormaechea no debería asumir si lo que se le ofrece es ser asistente de Camardón. De todos modos, es importante aclarar que en esa posición no está incluido Ormaechea, quien dará su decisión final en las próximas horas, después de analizar el tema laboral y de conversar con la comisión de rugby de Polo.
Eso sí, el argentino será el entrenador principal, y en eso no hay dudas. Por eso, al menos desde afuera, no parece haber mucha diferencia, y en definitiva parece ser una cuestión semántica, más allá de la importante cuestión de delimitación de la responsabilidades. De hecho, si se deja el anglicismo de lado y se nombra en español, no hay mucha forma de diferenciar: sería el entrenador principal. Y los sectores de Carrasco Polo que se oponen a que Ormaechea asuma en esas circunstancias lo harán más allá que el argentino sea “Head Coach o “Coach”, porque lo que entienden es que, por currículum, no debería ser un asistente, sino que debería llevar al menos la responsabilidad compartida. Y en cualquier hipótesis, lo que queda claro es que la autoridad última seguiría siendo del argentino.