Por Ignacio Chans-Redacción Rugbynews. Fotos: Victoria Acuña

El marcador es de Súper 14, pero eso se debe a que Christians cerró el partido 15 minutos antes del final y por eso pagó las consecuencias. Por eso, lo del azul el sábado tuvo claramente dos partes diferentes: los primeros 65, de un equipo dinámico, agresivo, solidario, siempre dispuesto a jugar con la pelota en la mano, liberarla rápido del contacto, acompañar al portador y definir, por afuera o por adentro, pero siempre definir y desgastar a su rival. Ese planteo le dio un cómodo 50-12, e incluso el segundo de esos dos tries fue un regalo defensivo tras un mal despejo dentro del ingoal. El resto fue un equipo displicente, que dejó que un flojo rival le sumara cinco veces en el ingoal propio, tres de ellas en los últimos 10 minutos.

 

Pero ante todo, son bastantes más las cosas positivas que las negativas que le quedaron al azul en su tercer fin de semana de pretemporada, tras la victoria ante Los Teritos el jueves anterior a Carnaval y la buena actuación en el Torneo John Vibart. De San Albano. Enfrente tuvo un rival muy flojo, es cierto, con poco más que un pack grande y combativo. Pero de todos modos, aún cuando el rival muestra poco no siempre es fácil presentar (y cumplir) con un plan de juego donde la dinámica y el ritmo con la pelota sea la bandera.

 

Christians lo hizo. Luego de un arranque parejo (incluido un try de maul de los argentinos), poco a poco los forwards empezaron a imponer condiciones, y los backs agarraron la batuta. Pachi Arocena, pero sobre Andrés Vázquez, lideraron un juego penetrante, buscando permanentemente el espacio y la velocidad. Los acompañaron bien el resto de los backs, (los dos wings, José Martínez y Juan Pedro Sanguinetti, tuvieron muy buena actuación); pero también los forwards se sumaron corriendo con la pelota en mano y apareciendo siempre al costado para ser opción de pase.

 

Así llegó el primero, tras un robo en un ruck y juego por el eje, y luego el segundo, con un libreto más tradicional: forwards ganando por adentro, acumulando rivales por el eje, pelota abierta, hueco por la punta y try del wing Sanguinetti.

 

Fue el mejor momento de Christians, donde la velocidad en el juego y el pase rápido se imponían, y ya no aparecían las lógicas imprecisión en el juego de manos, que generaron un par de knocks on e hicieron que los locales recién empezaran a sacar diferencias cerca del minuto 30. Otro try en la bandera, esta vez de Pachi Arocena, y luego dos grandes jugadas colectivas: una con Vázquez ganando la ventaja a toda velocidad para jugar con Joaquín Pérez -de buen primer tiempo-, y éste con Llovet, para que luego apareciera nuevamente el 8 en el apoyo y apoyara Martínez. Luego fue Sciarra que encontró el espacio corriendoi de contra y jugó hacia la punta, donde cada uno de los portadores la tomó y avanzó varios metros eludiendo tackles, hasta llegar al try de José Martínez bajo los palos, corroborando una tremenda tarde del wing, que supo explotar toda su velocidad.

 

El primer tiempo se fue con el sonido de los aplausos tras ese quinto try. Y en el complemento, Christians mostró otra cara, igual de efectiva. Aprovechó el desgaste al que había sometido a Los Cardos y empezó a facturar una y otra vez. Sin tanto brillo en ataque, es cierto, pero como consecuencia lógica de un patrón de juego: los argentinos que ya no podían salir, pateaban para salir de la presión de los forwards, los backs azules esperaban bien parados, jugaban a la punta y encontraban los huecos por el abierto en velocidad. Tres tries, dos casi calcados gracias  a la velocidad de Pepe Martínez, para poner el 50-12.

 

A partir de allí llegó el bajón. Primero Cardos se fue a buscarlo con los forwards –su única arma en todo el partido-, y ahora sí encontró alguna oportunidad. La defensa de Christians bancó bien en los últimos metros, pero el try argentino terminó llegando tras una fallida patada desde el propio ingoal, que derivó en tapping y la anotación argentina.

 

Entonces el partido cambió. La sensación era que ya no había nada por jugar, pero con amor propio y poco rugby, el equipo de Tandil no lo entendió así. Peleó con los forwards, movió un poco la pelota cerca de la formación y encontró espacios. Fueron otros tries tries (con uno de Carracedo en el medio para Christians, en uno de los pocos momentos de ese período en el que el azul reaccionó), para redondear el abultado score de 57-31. Fue una advertencia para Christians, que incluso generó la autocrítica del plantel al final del partido en la clásica ronda grupal. Seguramente, los dirigidos por el Mudo Inciarte deberán corregir ese punto. Sí lo hacen, si se parecen al del excelente primer tiempo, el 2011 pinta muy bien para Christians.

 

Old Christians 57-Los Cardos (Tandil) 31

OCC: Lenoble / Espiga / Storace / Bowles / García / M. Horta / Sciarra / J.Pérez / Passadore / M. Arocena /  Sanguinetti / Bomio / Llovet / J. Martínez / Vázquez

Cambios:  Astigarraga, Carracedo, Martín Balparda, R. Espiga, F. Inciarte

Tries primer tiempo: 3’Bowles, 6’ try de scrum Los Cardos, 30’ try Sanguinetti, 33’, try Arocena, 36’ try Martínez (convertido por Arocena), 40’ try Martínez (convertido por Arocena). Primer tiempo 29-7

Tries segundo tiempo: 5’ try Martínez (convertido por Arocena), 16’ try Llovet (convertido por Arocena), 25’ try Martínez (convertido por Arocena), 28 y 32’ tries Los Cardos, 37’ try Carracedo (convertido por Arocena), 40’ try Los Cardos

Cancha: Old Christians

Juez: G. Gerbasi

Amarillas: No hubo