Sin nada que perder y mucho por ganar, sin presiones: así entra Uruguay al Mundial de Seven. Buen panorama para sorprender
Ignacio Chans-Redacción RugbyNews
A las 9:50 de mañana Uruguay sale a la cancha para debutar en el Mundial de rugby seven de Rusia, su tercera copa del mundo consecutiva. Será ante Gales, el último campeón del Mundo, en el inicio del Grupo E –uno de los más difíciles del torneo- en el que también participan Fidji y Tonga.
Los celestes, que llegaron al Mundial tras ser vice campeones sudamericanos en febrero, llegan al torneo con el objetivo de mejorar el 20° puesto obtenido Dubai 2009, cuando consiguieron ganar su primer encuentro en una copa del mundo. Se trata de un plantel muy joven –promedio 24 años- pero ya tiene encima tres años de proceso, incluido el hito del título Sudamericano 2012 tras ganarle por primera vez en la historia a Argentina.
Tras el debut, Los Teros VII volverán a la cancha en la madrugada del sábado, a las 3:28, para enfrentar a Fidji, mientras que a las 7:08 jugarán con Tonga, que si bien está por encima de los celestes es el encuentro con más chances de sacar una victoria. Todos los torneos podrán verse por internet en la página de la International Rugby Board, mientras que el debut ante Gales irá en vivo por ESPN+.
De acuerdo a la posición final en la serie, Uruguay jugará en la madrugada del domingo las semifinales por el título (puestos 1 al 8) por la Copa de Plata (9 al 16) o por el Bronce (puestos 17 al 24).
Esta vez el Mundial llega en un mal momento para Uruguay: a mitad de año y con poca actividad internacional, a diferencia de los equipos que participan de forma permanente en el Circuito Mundial. La falta de rodaje seguramente se sienta, sobre todos en los primeros partidos. Seguro que será mucho más difícil exigirles aquí que en el Seven de Las Vegas o en Hong Kong, cuando el equipo traía un importante rodaje atrás. Y sobre todo, pensando que, a pesar de ser un Mundial, los objetivos claros para Uruguay materia seven pasan más por meterse en el Circuito Mundial y por la gran meta de Río 2016.
Quizás por eso es que el plantel se lo toma sin presiones, como un premio a lo logrado en los últimos tiempos. “La obligación fue llegar hasta acá, ahora hay que disfrutar” repitieron los jugadores en la previa. Sin presiones, y subestimado por muchos rivales es una buena oportunidad para dar una sorpresa y conseguir una buena ubicación en el máximo torneo internacional.