Javier Ceppi, periodista de Rugby del diario El Mercurio de Chile, arroja una visión crítica del momento de Chile en una columna exclusiva para Rugbynews
La preparación de los "Cóndores" para los partidos de las Eliminatorias/Sudamericano ha estado llena de situaciones que dicen mucho sobre el calamitoso estado del rugby en Chile. Partiendo por lo deportivo, la selección, que está al mando del argentino Daniel Graco desde agosto del año pasado, ha tenido un paupérrimo rendimiento en los últimos meses: sólo ganó un partido (contra el equipo "C" de Buenos Aires) y perdió los seis restantes (Córdoba dos veces, Cuyo dos veces, Argentina y Uruguay). El encuentro contra los "Teros" en el Sudamericano pasado es decidor, porque Chile tuvo la peor derrota de su historia ante los celestes. El gran problema es que los resultados son una consecuencia del juego que presenta la selección adulta. Los jugadores no entienden cuál es el diseño que quiere implantar Graco, la obtención en la pelota en las formaciones fijas es prácticamente nula y, como ha sido tradicional en los últimos años, la falta de tackle es francamente preocupante.
Por si fuera poco, en ese partido contra Uruguay en Montevideo, Chile perdió a uno de sus "gordos": el pilar Nicolás Venegas fue elegido para el sorteo antidóping y dio positivo por cannabis. La IRB resolvió castigarlo por cuatro meses y la sanción termina justo después del encuentro ante los "Teros" por el Sudamericano. Más dramático aún es el caso del joven fullback de Sporting Francisco Metuaze, que fue encontrado con clenbuterol y fue sancionado por dos años. Así, de una barrida, Chile ya no tiene dos jugadores que Graco tenía considerados.
El compromiso de los "extranjeros" también ha ido decayendo. Los "Cóndores" sólo contarán con Sergio Valdés (Auch de la ProD2) y Felipe Burgos (Belgrano de la URBA), y no hubo recursos para traer a Sebastián Gajardo (Bobigny de Francia) y Matías Vergara que juega en Alemania.
El Sudamericano, además, encuentra la Federación de Rugby de Chile (Feruchi) en una situación dramática. La directiva actual está impugnada por el Tribunal Calificador de Elecciones por su "ilegalidad" y no van a haber elecciones hasta dentro de 60 días. La Feruchi está con un severo problema de caja y sus deudas se estiman en 100 millones de pesos. La confianza entre jugadores y directivos está completamente quebrada y no se ve una posible reconciliación.
En este negro panorama para el rugby chileno, no sería descabellado pensar en una derrota en Viña del Mar ante Brasil, en el primer partido de las Eliminatorias. Ganarle a Uruguay y aspirar a llegar a Nueva Zelandia 2011 es realmente una quimera.