Sin jugar bien, pero cumpliendo un muy excelente trabajo defensivo y lastimando cuando debía, Old Boys le ganó 23-3 a Los Cuervos y clasificó a las semis del Clausura y al Súper 4
Está donde quería
Sin brillar, pero sumando cuando debía para marcar el rumbo del partido y condicionar al rival, Old Boys derrotó 23-3 a Los Cuervos, para asegurar su pasaje a las semifinales del Torneo Clausura, y con eso, al Súper 4 que definirá al Campeón Uruguayo. Del otro lado, Los Cuervos se fue en amagues, en síntomas de que podía llegar a complicar el partido. Pero al igual que en toda la temporada, no supo concretarlo, y se fue desinflando hasta que el partido se le fue de las manos, y con eso, la pequeña esperanza que mantenía de seguir en carrera.
En el arranque pareció que podía estar para cualquiera. Ambos intentaron jugar con agresividad y velocidad de balón, pero las marcas dejaron claro desde el principio que iba a ser difícil darle dinámica a la pelota.
Y en ese trámite, como suele ocurrir en los partidos definitorios, lo detalles hicieron la diferencia Cuervos arrancó arriba con un penal, pero a continuación llegó la única jugada en el que el azulgrana pudo enganchar agresividad, verticalidad y mantener la pelota viva. Albanell jugó rápido con Gortari, que madrugó a la defensa de Cuervos, bancó dos tackles y en el contacto pudo jugar con Bordaberry, que recorrió los últimos dos metros para apoyar el try del 5-3. Fuerza, velocidad de pases y definición para que el azulgrana pasara arriba.
No volvió a tener esa efectividad en toda la primera parte, pero los indicios tratando de sacar jugo de eso le permitieron llegar a los dos siguientes penales, que Albanell transformó en el 11-3. Con más amagues que concreciones, con más sensaciones que realidades, Old Boys dominaba el partido y se proponía ir por más.
También fue ese el momento en que Los Cuervos probó y se dio cuenta que no era su tarde. Probó con el pie arriba, y al cajón, pero no tuvo resultados y el rival le ganó el duelo de kicks. También avanzando en corto, y lo paró una muy buena defensa azulgrana. Probó por afuera y nunca tuvo el ritmo necesario para desordenar a un rival bien plantado, que empezó a demostrar que en la defensa estaría la gran explicación de su victoria. Apenas con Barcos yendo de frente logró en ocasiones quebrar marcar y romper la línea de la ventaja, pero el tercera línea nunca tuvo apoyo suficiente para hacer de esas jugadas algo con continuidad.
Así se fue el primer tiempo, con un 11-3 ajustado a lo que era un flojo partido. Para la recarga Naón y Peña mandaron a Campomar a la cancha, y Old Boys mejoró en dinámica en la distribución de pelota, aunque rápidamente Chapi se iría a los 11 por amarilla tras matar el juego. Así y todo, Old Boys seguía siendo superior poniendo el juego donde quería con el pie, y obteniendo la pelota, donde hizo un muy buen trabajado en el contrarruck, aunque era impreciso en el manejo rápido y por eso tampoco tenía chances claras.
La sensación era que Old Boys lo liquidaría cuando terminara de sumar alguna jugada con buena continuidad. Sin embargo, los minutos empezaron a pasar y os Cuervos se dio cuenta que, a pesar de los pesares, seguía en partido. Se animó algo, mejoró en la agresividad de los forwards y al menos logró llevar un poco de juego al campo rival, aunque siempre lejos de las 22.Tuvo un penal de Lewis que pudo haber empezado a cambiar la historia, pero la pelota ancha fue el símbolo de la tarde: la interrogante del “qué hubiese pasado si”.
Entonces, superado ese “mini temblor”, Old Boys se fue a buscarlo de nuevo Y el trabajo en el ruck le terminó dando resultados: robo y otra vez el Colo Germán Albanell armó una jugada de try. Vio el hueco sin poste en la base, se mandó en velocidad y terminó apoyando el try del 16-3, que a 10 minutos del final sentenciaba el encuentro.
Fue la oportunidad para que Old Boys se liberara. Por fin ya pudo jugar a la punta con más eficiencia, y avanzar metros por allí. Y a través de un line y pelota abierta, encontrar el espacio para el try de Puig, que puso el 23-3 final. No fue un gran partido de Old Boys, y su principal virtud fue la defensa. Pero eso, en medio de une etapa en la que atraviesa muchas lesiones y recambio, no es poco. El azulgrana se puso el overol y ya está en el Súper 4. Oportunidad para, como el año pasado, barajar y dar de nuevo, y empezar a preparar el equipo para las que duelen.