Tras la suspensión del cotejo que debería haberse llevado a cabo este pasado domingo en el Stade de France, el comité del 6N analiza las posibilidad de cuándo jugarlo dentro de un calendario muy apretado y poco flexible
Al parecer el partido entre Francia e Irlanda no tendría posibilidades de ser jugado este mes. Con un apretado calendario, que no permite casi modificaciones, el Comité del Seis Naciones no logra encontrar una fecha dentro de la temporada europea que venga bien para disputar el cotejo.
Por estas horas se especula que el choque se juegue el fin de semana del 3 y 4 de marzo próximo, durante el segundo receso que tendrá el certamen, en medio de la tercera y cuarta jornada del calendario.
De no ser posible, incluso se habría sostenido la descabellada idea de jugarlo en el mes de agosto, ya en la próxima temporada. Cosa que desvirtuaría totalmente el torneo en disputa y daría ventaja a los galos de jugar con todos los resultados vistos, en caso de que llegasen con las chances intactas de hacerse del título.
Este encuentro estaba previsto para el sábado último, pero fue postergado por decisión del árbitro inglés Dave Pearson, puesto que el campo de juego del Stade de France estaba congelado. Unos 80.000 espectadores ya ocupaban sus plazas en las tribunas y debieron volver a sus casas sin fiesta.