Esta noche, desde la hora 19, el rugby uruguayo decidirá su rumbo para el año 2011. La Asamblea General Ordinaria de la URU tiene previsto estudiar la memoria y balance de 2010, para luego pasar a votar la renovación por dos años de cuatro puestos de la Directiva: tres vocales (Álvaro Alonso, Alejo Suárez y Álvaro Barragán) y tesorero (Andrés Pieroni).

 

Por otro lado, está prácticamente confirmado que José Muñoz, actual secretario, no continuará en el cargo por motivos personales, lo que llevará a la necesidad de votar un nuevo nombre para ese cargo por un año.

 

Por estatuto, tres directivos tienen un año más de mandato: el presidente Gustavo Zerbino, el vicepresidente Alejandro Sagasti y el vocal Marcello Calandra. 

 

A diferencia del año pasado, en el cual los días previos a la Asamblea tuvieron varias reuniones cumbre de presidentes, este año lo que se destacó fue el ambiente de tranquilidad –en gran medida porque los principales cargos tienen un año más de mandato-. Recién en las últimas horas, luego de Navidad, existieron algunas conversaciones entre clubes, y entre clubes y dirigentes, para avizorar el mapa que se puede esperar en la Asamblea.

 

Por el lado de la URU existió un movimiento para intentar que la Directiva de 2011 sea de unidad, para lo cual hubo conversaciones para sumar a Carrasco Polo y a Old Boys, que hace un año no apoyaron a la actual Comisión. La idea es lograr un consenso, y no comenzar otro año sin el apoyo de dos de los principales clubes del rugby uruguayo. De todos modos, todo indica que ninguno de los dos clubes se sumará con la actual conducción de la Unión.

 

Por otro lado, en casi todos existe el convencimiento de la necesidad de un consenso, aunque los caminos no coinciden. Eso abre la puerta a la posibilidad de un cuarto intermedio, para que en los próximos días se siga estudiando una vía paran lograr un acuerdo.