Ya está en tierras neozelandesas el máximo trofeo a nivel del rugby, proveniente de la ciudad de Dublín
Al fin arribó a la ciudad de Auckland la protagonista de la que todos se quieren hacer en su poder. La Webb Ellis Cup fue trasladada finalmente a tierras maoríes, directamente desde la sede de la International Rugby Borrad. A cargo del traslado estuvo el presidente de la misma, Bernard Lapasset a través de un avión privado dispuesto por Fly Emirates.
Similar a lo acontecido con todos os seleccionados que llegan al país de la cita mundialista, la copa, a la hora de su arribo, fue recibida por cientos de personas, fiestas, ruidos, e incluso un tradicional baile del haka.
El mismo Lapasset manifestaría que se nota en este pueblo neozelandés una gran fiebre por el rugby, y con este inmenso recibimiento se ve reflejada la ilusión que estos tienen de retener un título que le es esquivo hace mucho tiempo.
El primer ministro Key por su parte, plantearía que la fiesta ha sido muy grande para recibir la copa, y que ojalá el 23 de octubre se pueda producir otra en honor a que la misma queda en casa. Para esto los All Blacks tendrán