Tras varias idas y vueltas, el polémico internacional aussie llegó a un acuerdo con la Unión de su país. Seguirá jugando en los Reds y en Australia como lo venía haciendo
Si bien desde junio que Cooper había arreglado un contrato que lo ligaba a los Reds por tres años más, su polémica salida de la selección durante el Rugby Championship había hecho que todos se preguntasen sobre su futuro.
En ese entonces el apertura se había mostrado molesto al salir de los Wallabies, cuando llegó a asegurar que el vestuario era “tóxico” y que eso le estaba haciendo mal a su carrera. Incluso había planteado la posibilidad de irse al Rugby League.
Sin embargo, y tras varias charlas, las partes lograron acercarse y hoy, viernes, el jugador hablará en Brisbane donde confirmará su continuidad en la estructura de la ARU.
Fuente: www.rugbytime.com