Llegaron en la mañana del miércoles –noche del martes de Uruguay- a la capital de Siberia; el plantel está en buen estado físico e intentando adaptarse al cambio de horario
Los Teros llegaron ayer a la hora 22 de Uruguay (9 de la mañana del miércoles en hora del centro de Rusia) a la ciudad de Krasnoyarsk, capital de la provincia de Siberia, para el partido del sábado a las 5 de la mañana por la ida del repechaje final al Mundial.
Los celestes arribaron tras un largo viaje que comenzó el sábado, y que incluyó una escala de dos días en el Centro de la Federación Francesa en Marcoussis.
En la madrugada uruguaya los celestes tenían previsto descanso, luego regenerativo y por la tarde hacer el primer movimiento táctico en tierras siberianas.
La URU tenía todo pronto para un viaje casi ideal: viaje directo a París, escala de cuatro días en el Centro de Alto Rendimiento de la Federación Francesa de Rugby en la localidad de Marcoussis, y viaje el martes a Krasnoyarsk vía Moscú.
Pero el principal problema que tuvieron los celestes fue la huelga de pilotos de pilotos de Air France, que hicieron que el vuelo directo Montevideo-París tuviera que cambiarse por otro por Aerolíneas Argentinas, con escalas en Ezeiza y Barajas, y necesidad de viajar en tandas por falta de cupos: algunos viajaron el sábado de mañana, otros por la tarde, y terminaron llegando en tres tandas a París, entre el domingo y el lunes por la mañana.
El lunes hubo entrenamiento en doble horario en Marcoussis (defensa por la mañana y ataque por la tarde), y en la mañana de este martes llegó el turno de viajar a Krasnoyarsk, con escala en Moscú. Mientras tanto, el asistant manager del plantel Fabián Stipo viajó adelantado para tener todo pronto y ya sobre la noche del martes llegó a la sede del partido.
Una vez arribados, y luego del descanso necesario, deberán empezar a adaptarse tanto a las 11 horas de diferencia como al frío de la capital de Siberia. Afortunadamente, el pronóstico para el sábado es soportable: soleado y con 6 grados de máxima.
La otra buena noticia es que físicamente todos los jugadores están a la orden y trabajando con normalidad, pese a que varios arrastraban algunas molestias musculares y diversos golpes.
El lunes se sumaron los jugadores que militan en el rugby profesional de Francia, entre ellos Rodrigo Capó, la máxima estrella del rugby uruguayo, que milita en el subcampeón del Top 14 Castres. El jugador fue recibido de excelente manera por el plantel, ratificando la conexión que tenían desde hace varios meses esperando que se pudiera concretar a vuelta. Un detalle de color que ilustra la situación: pese a que por diversos motivos no había podido concretar su vuelta, Capó integraba desde hace varios meses el grupo de Whastapp de los jugadores de selección, y los siguió de cerca con mensajes de apoyo en el partido ante Hong Kong.
El partido del sábado a las 5 de la mañana será transmitido en vivo por NSTV y por la web del Mundial. El partido de vuelta será el 11 de octubre en el Estadio Charrúa, y definirá quien se queda con la última plaza a la Copa del Mundo.
Si bien aún no se ha anunciado, antes de partir el DT Pablo Lemoine dijo a la prensa que ya tenía definido el equipo en su cabeza, aunque quería esperar para anunciarlo oficialmente.