La URU presentó la gran definición entre Old Boys y Old Christians en Charrúa, hablaron jugadores y dirigentes

Marcello Calandra: “Creo que después de muchos años viviremos una fiesta del rugby muy importante, no ´solamente por los dos clubes que la van a disputar, que cuentan con una trayectoria muy importante, sino por el entorno que tendrá, que no lo ha tenido anteriormente. La URU les va a brindar un escenario acorde a una fiesta. Sabemos que hay movidas de ambos clubes, hay muchas ganas de estar, son equipos que hace unos años que no consiguen el título. Lo primordial es que sea una fiesta, esperemos que el tiempo acompañe”

Andrés Vilaseca: “El partido contra Cuervos tuvimos un excelente primer tiempo, un bajón en el segundo con muchos penales, que es lo que tenemos que corregir. La final la vivimos tranquilos, tratamos de no pensar en la gente y en el color sino en el partido, y en salir a jugar, que es lo que nos trajo hasta acá”.
“Sin duda jugar en el Charrúa tiene un plus, el hecho de la gente, tribunas y todo el color. Hay que llevarlo tranquilo, penando en el juego, y estar tranquilos que es una final, el partido más lindo para jugar”.

Santiago Cat, presidente Old Boys: “Para el club es un honor y un orgullo venir al Estadio Charrúa y consolidarlo como la casa del rugby”.
Sobre las sorpresas que preparan las hinchadas: “Tratamos, así como los jugadores se dedican a entrenar y concentrarse en la cancha, de dedicarnos otras cosas. Sabemos que hay una movida y hemos dado un par de directrices para que esto sea un festejo de dos clubes del mismo barrio. Es lo que pretenderíamos de la gente de Old Boys, estaremos encima para controlar eso. Los propios colegios se ha divulgado mucho, hay muchas ganas de venir y adelantar”.

José Astigarraga, jugador Old Christians: “Tuvimos un partido duro el domingo, lo pudimos sacar, al final cometimos un par de errores que casi nos cuestan el partido, nos faltó saber cerrarlo. Esta semana hay que vivirla con tranquilidad. Muchos dicen que es la mejor semana, otros dicen que es la peor. Hay que vivirla tranquilos y llegar al domingo para explotar en la cancha, sin pensar en nada más. Vamos a tener que acompañar el color del estadio y dejar todo en la cancha”.
“Tuvimos la suerte de jugar tres partidos en el Charrúa, estamos bastante familiarizados, los vestuarios están buenísimos, estamos muy cómodos. Sobre los nervios nos dijimos entre nosotros que fuimos nosotros los que nos ganamos llegar hasta acá. Tenemos que disfrutar, nadie nos regaló nada y por eso tenemos que disfrutar de entrar a la cancha. Es una final y todos estamos nerviosos, pero hay que dar el máximo”.