Los Baby Boks hicieron un buen partido y vencieron a una durísima Inglaterra por 27-22
En uno de los mejores partidos del IRB JWC en el que se vieron siete tries, Sudáfrica venció a Inglaterra por 27 a 22 y mantuvo la tercera posición que consiguió en las dos últimas ediciones.
Haciendo honor a un partido por el tercer puesto de un Mundial Juvenil, los dos equipos arrancaron muy bien y brindando un atractivo espectáculo para la buena cantidad de público que se acercó al Coloso del Parque en Rosario.
En los primeros minutos del partido pasó de todo. Sudáfrica se puso en ventaja por medio de un try bajo los palos de Nico Scheepers tras una buena jugada por los backs. Minutos después Inglaterra dio vuelta el marcador gracias a tries de Marcus Watson y Freddie Burns, logrados gracias a un juego inteligente, cuidando la pelota y realizando un juego de muchas fases.
Sin embargo Sudáfrica no se durmió y poco después alcanzó al cuarto try del partido y dejaba el marcador a dos puntos para los europeos.
Con el sol cayendo y con Inglaterra cómo principal dominador, ninguno de los dos podía tomar distancia en el marcador, aunque sí brindaban un gran espectáculo, ya que intentaban jugar todas las pelotas y utilizando poco el pie.
Fue Inglaterra quien volvió volvió a cruzar al ingoal y movió nuevamente el tanteador, al entrar otra vez por una de las puntas y con el pilar Joe Marler tirándose de palomita para anotar como si fuera un wing. Así el seleccionado de La Rosa se fue al descanso ganando 19 a 12.
Pero la diferencia no le duró mucho a los ingleses. En el comienzo de la segunda etapa, tras una buena obtención en el line, los Baby Books jugaron la pelota con los backs a lo ancho de la cancha y consiguieron su tercer try por intermedio de su fullback Patrick Lambie.
Con el partido parejo como se planteó, recién al minuto 50 Inglaterra intentó su primer envío a los palos, aunque Freddie Burns no pudo sumar los tres puntos desde lejana posición y el score se mantuvo inalterable.
Tras ese intento fallado, creció el poderío sudafricano que comenzó a jugar en campo contrario. Así logró pasar al frente con un try por lo que fue su mejor arma durante todo el torneo, su juego con los backs.
Con el correr de los minutos y a diez minutos del final del partido, las defensas de ambos equipos se hicieron más fuertes debido al cansancio de los jugadores tras el intenso partido e incluso el bajón físico se notó en los ingresados durante el segundo tiempo.
Aunque no hubo más tries, ambos equipos sumaron un penal, que mantuvo la diferencia final de cinco puntos para los africanos. Así, se llegó a un final abierto en el pudo haber cambiado todo. Pero, en la última jugada, Inglaterra tuvo una buena corrida a lo largo de toda la cancha que no pudo concretar y por primera vez en la historia del JWC, quedó fuera del podio.