Uruguay jugó muy mal, pero con orden defensivo y scrum venció 16-0 a España para cerrar la Nations Cup con victoria
Ignacio Chans-Redacción RugbyNews
A pesar de jugar quizás su peor partido en el año, Los Teros cerraron la Nations Cup con una victoria 16-0 ante España, que les impidió terminar en el último lugar del torneo.
Luego de un flojísimo primer tiempo que terminó 0-0, en el que Uruguay cometió infinidad de errores en todos los rubros que España fue incapaz de aprovechar, los celestes lo definieron en el segundo tiempo, con la simple receta de un scrum que fue hacia adelante, impuso condiciones y quebró a un débil rival. Dos tries desde esa formación, uno del capitán Juan Gaminara y otro de try penal, le dieron la ventaja a un equipo uruguayo que difícilmente podría haber cometido más errores.
En una tarde de extremo calor -33 grados, que llevaron al juez a parar el encuentro cinco veces-, al equipo uruguayo le volvió a faltar obtención en el line –punto flaco de todo el torneo- pero además el juego de manos y el juego en el ruck fueron muy flojos, lo que conllevó muchísimos knock ons, pelotas perdidas en el contacto o penales. A diferencia de lo que ocurrió ante Rumania, fue mucho mas por errores propios que por virtudes ajenas de un rival que estaba lejos de someter. Al revés: Uruguay tenía más la pelota, pero siempre se iba con las manos vacías porque además, cuando generó penales, apostó por ir a un line que nunca obtuvo limpio en lugar de patear.
Para peor, en ese primer tiempo el scrum –que mostraba cierta superioridad- acumuló penales que le impidieron una y otra vez elaborar ataques y ganar la ventaja. Con todo ese panorama, Los Teros nunca tuvieron pelotas profundas para jugar, y con poco, España complicó en el contacto a los celestes y encima tuvo chances de contra, la más clara un try anulado por offside en una mala salida con el pie de Favaro.
El trámite se repetía una y otra vez: posesión y territorio de Uruguay, errores en la obtención o en el juego, y España que no podía aprovechar esas oportunidades. Una y otra vez el mismo esquema.
A pesar de los errores y los cortes por calor que quitaban continuidad, Uruguay salió a buscarlo en el segundo tiempo y pareció empezar a encontrar el ritmo de juego, al menos para lograr jugar dentro de la defensa rival, aunque errores en el breakdown o en el manejo le impedían sumar chances. Al final, un scrum que fue hacia adelante y un par de fases en corto le dieron el primer try, de Gaminara.
El scrum fue la bandera a partir de la cual Los Teros crecieron en confianza y en juego. Fue el mejor lapso celeste, que bancó sólido en defensa, usó el pie para trasladarle la presión al rival y generó penales que no pudo traducir en puntos. Un fallo defensivo en la base del ruck casi trae un solitario try español –que en ataque no mostró nada- pero lo terminó salvando Rodrigo Silva. Y al final, otra vez el scrum apareció para sacar ventajas y llegar al try penal del 16-0.
Uruguay cerró una mala Nations Cup. Más que en los resultados, en un juego en el que se dio un paso atrás respecto a las buenas señales que se habían visto hasta acá. Apenas quedan para el destaque 25 minutos del segundo tiempo ante Italia, y 20 del partido ante España. Ante Rumania fue superado clarísimamente, y en los otros partidos tuvo bajones notorios de juego. Lo bueno es que, ante rivales muy superiores a España o Italia A, el equipo mostró un juego totalmente diferente, lo que da la esperanza que en algún momento vuelva el juego que empezó a verse en los últimos meses. Y que ante todo, en una tarde donde no se podía perder, el equipo supo encontrar el camino a la victoria.