Sudáfrica fue mucho más que Uruguay y lo goleó 53-0, ahora queda buscar la victoria ante Corea
Fue una pesadilla en el medio de la madrugada. A pesar de un primer tiempo en el que Uruguay defendió con mucha garra y por momento disimuló diferencias, en el segundo tiempo los Springboks afilaron las garras, pusieron primera y pasaron por encima a Uruguay. No le dieron chance a nada, y salieron a buscar la goleada, apurados en lograr la mayor diferencia posible. Ante unos Teros que cuidaron jugadores y le dieron chance los que no habían jugado hasta ahora, Sudáfrica aplanó a Uruguay y lo goleó 53-0.
Se sabía que era un partido para defender y tatar de hacer lo que se pudiera cuando hubiera pelotas propias. Y en el primer tiempo se logró al menos mantener la posesión en las salidas rivales y el orden para defender, incluyendo una salvada de Bueno en la punta para evitar un try sudafricano. En esos siete minutos fueron tres: el primero tras un penal en un ruck en el que los celestes habían recuperado la pelota. El atacante sudafricano movió rápido y sorprendió para apoyar. El segundo vino luego que el rival moviera la pelota a la punta y encontrara a la defensa bien parada, pero al jugarla al medio nuevamente se dio el quiebre defensivo. Y en la siguiente salida, la primera pelota perdida en la recepción, la defensa mal parada y el agujero para el tercero.
Luego Uruguay tuvo un poco más la pelota, aunque sin chances de avanzar con ella. Pero al menos pudo pelearla lejos del ingoal rival. Y así s e fue el primer tiempo, con un rendimiento aceptable, aunque con fallas en el tackle que se pagaron caras.
Y todo eso se agravó en el complemento. La fuerza de los sudafricanos fue demasiada para hacer tackles efectivos, lo que provocó desorden enorme en defensa y un festín del rival, que cada vez que tuvo la pelota quebró, generalmente por el medio de la cancha y aprovechando que ganaba siempre en el uno a uno. Uruguay no tuvo posesión, no tuvo orden y no tuvo tackle, y enfrente tuvo a uno de los mejores equipos del mundo jugando al 100%. La consecuencia fue seis tries más, para un doloroso 55-0. Ahora queda Corea, para lavar la cara y buscar una victoria que permita un buen cruce para la Copa de Bronce el domingo.
Los celestes entraron a la cancha con Conti, Braun y Carracedo, Lussich y Morales, Jolivet y Bueno. Luego ingresaron Martínez y Dugonjic .