Hace casi dos años que Christians y Polo no juegan una final, y tres de la última definición entre ambos de un torneo corto
El duelo Polo-Christians se ha convertido, de varios años para aquí, en uno de los “clásicos modernos” del rugby uruguayo. Intermitentemente, muchísimos fueron los cruces en los últimos 20 años. Sin embargo, en este 2011 hace dos años que ambos no se ven las caras en partidos a todo o nada.
Si se habla de final del Uruguayo, el último antecedente son la definición 2009, cuando Carrasco Polo ganó con claridad en el Country Los Teros, para llevarse el Uruguayo 2009. Allí Polo había llegado como campeón del Apertura (se había impuesto a Old Boys en la final), mientras que el azul había llegado a la final tras también ganarle a los azulgranas en las semifinales por el Uruguayo (recién sería en 2010 que el torneo comenzaría a definirse con sistema de Liguilla).
Pero si de finales de torneos cortos se trata, y más específicamente del Clausura, el antecedente es aquel electrizante encuentro definitorio del Clausura 2008, que Old Christians ganó 27-25 con un penal de Matías Arocena en la última jugada del partido.
En aquel entonces, Polo llegaba como campeón del Apertura (27-24 había ganado en la final, también a Christians), y con una victoria se consagraría Campeón Uruguayo. Todo estaba para el caballito, que en el último minuto acertó una larguísimo kick desde la mitad de la cancha por intermedio de Etcheverry. Pero hubo una pelota más, que Christians consiguió, llegó el penal de Polo y la larga patada esquinada del 10 azul, que le dio el festejo.
Una semana después llegaría finalísima por el Uruguayo, y la realidad sería muy diferente. Polo sorprendió en su plan de juego, y apabulló a Christians en la primera parte, hasta sacarle una diferencia casi indescontable, que pese a la reacción del azul en el segundo tiempo, le terminó asegurando al caballito el título uruguayo, el primero tras perder en 2007 la histórica racha de 17 títulos